Artículo creado con ayuda de inteligencia artificial Chat GPT y curado por humanos.
Si hace poco que has incorporado nuevo gato a la familia, seguramente te preguntes si juegan entre ellos o si, realmente, se llevan mal. Esta historia comienza hace un mes más o menos, cuando me animé a dar una nueva oportunidad, la segunda ya, de acoger en casa a un gato en busca de familia de adopción. Trabajo desde casa desde hace un año y eso me permite estar pendiente de Noa, mi gatita tricolor. Desde hace un tiempo la veía un poco triste, apagada. Pensé que además de jugar con ella un ratito cada día, le vendría muy bien la compañía de otro michi, alguien que hablara su idioma. Este sería nuestro segundo intento, y digo «nuestro» porque los tres, dos gatos y yo, formaríamos parte de este proyecto.
Por poner antecedentes, meses atrás acogimos a Flora, una gatita de unos dos meses (y dos kilos y medio menos) cariñosa y muy buena. Aquello acabó convirtiéndose en juego de tronos y durante una semana tuvimos peleas, bufidos y gestas varias. Cuando al fin comenzaron a entenderse Flora ya había encontrado una familia adoptante, así que allí acabó nuestra historia.
Los gatos son animales fascinantes y observarles es una idea magnífica para aprender a conocerles y a interaccionar con ellos. En definitiva, a forjar una buena relación entre ellos.
Cuando un nuevo michi llega a la familia puede resultar confuso diferenciar si dos gatos están peleando o simplemente jugando. En este artículo, aprenderás algunas claves importantes para entender si tus gatos se están peleando o jugando. Y lo más importante, te ayudaremos a asegurarte de que tus gatos estén sanos y felices. Vamos allá.
Observa la postura corporal de tus gatos
La postura corporal de los gatos puede darte muchas pistas sobre si están peleando o jugando. Durante una pelea, los gatos suelen tener una postura tensa, con las orejas hacia atrás, el pelaje erizado y las colas abultadas. En un primer encuentro entre Noa y Flora se les puso la cola a los dos como un mapache. Era una señal de que aquello no va bien. Iluso de mí, que pensaba que después de las presentaciones comenzaría una gran amistad.
Por otra parte, los comienzos difíciles pueden ser parte del proceso de aceptación. Hablando con amigos que incorporaron nuevos gatos a la familia, casi todos pasaron por momentos similares. Y es que los gatos son animales muy territoriales. Si para un perro lo más importante cuando alguien nuevo lleva a casa es sentirse seguro, para un gato es defender la que considera su fortaleza, su territorio: su casa.
También pueden bufar, gruñir o mostrar los dientes. Pueden ser indicadores confusos a veces, ya que los gatos pueden mostrar estos comportamientos tanto durante el juego como durante una pelea. Por lo tanto, es importante tener en cuenta el contexto y el resto de indicadores de comportamiento para determinar si se trata de un juego o una pelea real.
Cuando los gatos juegan, suelen tener una postura más relajada, con las orejas en posición normal, el pelaje suave y las colas moviéndose de manera tranquila. No suelen emitir sonidos de enfado y suelen tener una expresión facial relajada.
Observa los movimientos
El tipo de movimientos que realizan los gatos también puede darte pistas sobre si están peleando o jugando. Durante una pelea, los gatos tienden a moverse de forma rápida y agresiva, con movimientos bruscos y directos, como arañazos y mordiscos. En cambio, cuando los gatos juegan, sus movimientos suelen ser más suaves y flexibles, con saltos, zarpazos sin aplicar fuerza y movimientos de caza. También pueden perseguirse mutuamente y alternar roles de cazador y presa.
¿Tus gatos se muerden en el cuello? Si solo se están mordiendo en el cuello, pero muestran una postura corporal relajada, movimientos suaves y emiten sonidos suaves, podría ser parte de un juego un poco bruto, pero amistoso.
En otros casos es más probable que estén peleando en lugar de jugar. Morderse en el cuello es una técnica de caza natural en los gatos, y puede indicar agresión y dominancia en lugar de un juego. Sin embargo, es importante tener en cuenta el contexto completo de la situación y otros indicadores de comportamiento para comprender adecuadamente lo que está sucediendo. Por ejemplo, si los gatos están mostrando otros signos de agresión, como posturas corporales tensas, movimientos bruscos y sonidos agresivos, es más probable que estén peleando.
Observa los sonidos que emiten y su tono
Durante una pelea, los gatos suelen emitir sonidos fuertes y agresivos, como bufidos, gruñidos y maullidos intensos. En cambio, cuando los gatos juegan, suelen emitir sonidos más suaves y agudos, como maullidos agudos y ronroneos. También pueden emitir sonidos de juego, como chirridos o trinos.
Observa la duración del comportamiento
Las peleas entre gatos suelen ser breves e intensas, con momentos de pausa y luego más agresión. Cuando los gatos juegan, suelen tener sesiones de juego más largas, con períodos de descanso intercalados. Además, los gatos que juegan suelen tener una actitud más relajada y disfrutan del juego, mientras que los gatos que se pelean suelen mostrar señales de tensión y estrés.
Observa la relación entre los gatos
Todos tenemos nuestros momentos, con los gatos pasa lo mismo. Las peleas entre gatos pueden ser parte de un comportamiento sano de la especie, pero hay que estar atento a su comportamiento general. La relación entre los gatos involucrados también es un factor importante a considerar. Si los gatos tienen una relación previa de amistad o han convivido juntos durante mucho tiempo, es más probable que estén jugando en lugar de peleando.
¿Qué puedo hacer para que mis gatos no se peleen?
Observa la postura corporal, movimientos, tono vocal, comportamientos adicionales, duración del comportamiento y la relación entre tus gatos te ayudará a determinar si están peleando o jugando.
Los comienzos de una relación felina pueden ser complicados. No podrán sentarte con ellos y tener una charla, pero puedes seguir algunas pautas para mejorar su entorno y seguir algunos consejos para que tus gatos se peleen menos.
Si tienes dudas o preocupaciones, siempre es mejor consultar con un veterinario o un experto en comportamiento felino.
4 comentarios
Hola! Lo primero felicidades por el blog! He llegado a él buscando información sobre el comportamientos de los gatos con la llegada de uno nuevo. Leer este articulo me ha ayudado a entender algo mas lo que esta sucediendo estos días en nuestra casa.
Tenemos un gatito que lleva con nosotros un año, macho castrado, muy juguetón y muy sociable con nosotros.
Hace tres días que hemos adoptado otro gatito macho de 2 meses. Poco miedoso, cariñoso y juguetón.
Nuestro gato en tan solo dos días parece haberle aceptado bastante bien, ya no hay bufidos, le respeta cuando el nuevo esta comiendo o bebiendo, va al arenero y duerme pero en cuanto le va andando por casa se tira a cazarle del cuello. No lo hace de forma agresiva, no le hace herida, ni le gruñe. Creemos que lo hace en modo de caza y el pequeñin la mayoría de las veces se deja, como además le coge del cuello incluso a veces parece relajarse un poco pero ya las ultimas veces esta un poco molesto porque es bastante atosigante y le ha bufado y gritado (cuando esto ha sucedido nuestro gato le ha soltado sin mas y le ha dejado tranquilo por un momento breve). Esto es de continuo, en cuanto le ve moverse a por su cuello que va y en dos ocasiones le hemos visto que se lo llevaba arrastra del cuello, sin hacerle daño (parece).
Nos preocupa que tengan que convivir así y que nuestro gato no deje de hacer esto nunca. Hay una diferencia de tamaño considerable. 5 kilos contra 700 gramos jeje.
¿Es algo normal? ¿Hay algo que nosotros debamos hacer?
Gracias de antemano y muchas gracias por este blog que voy a continuar leyendo.
Hola Ana,
Muchas gracias por tu mensaje. Antes de nada te cuento que no soy etólogo ni veterinario. Te respondo sobre mi experiencia personal y lo que he podido conocer preguntando a algunos especialistas. Dicho esto… 🙂
Por último, si crees que nada de esto te funciona (que espero que sí), te recomendaría hablar con una persona especialista en etología felina. Espero que te haya ayudado. Cuéntame en un futuro si quieres cómo avanza la cosa.
Un abrazo
Hola!! Mil gracias por la entrada, me ha parecido super interesante. Yo ando un poco despistada porque metimos a una cachorrita de 5 mesitos en casa (tengo una de un año y poco) y parece ser que se llevan bastante bien (comen juntas y están juntas sin problema). Llevan una semana y poco juntas. La cosa es que cuando juegan no sé si juegan o pelean porque todos los indicios me dan a entender que están jugando (se persiguen pero se van turnando, tienen las orejas elevadas, etc) pero de vez en cuando cae por en medio algún bufido o algún gruñido. Cuando eso ocurre la.otra para y la deja en paz. No sé si realmente están jugando o de alguna manera están midiendo hasta dónde puede llegar la otra. ¿Alguna idea?
Gracias!!
Hola Laura! Gracias por compartir tu experiencia. Coincido contigo en tu interpretación (sin ser etólogo). En estas primeras semanas se están conociendo mutuamente, midiendo. Ya es todo un logro que en tan poquito tiempo coman juntas entendiéndose bien. Piensa que tu primer gato lleva unos meses de vida exclusiva con humanos, y tiene que adaptar sus habilidades sociales (fuerza, intensidad) a la convivencia con nuevos miembros de la familia.
Mis gatos que llevan 6 meses juntos, con personalidades distintas, se llevan bien y en alguna ocasión asoma algún bufido o un comportamiento que puede parecer más agresivo, pero es completamente normal.
Te diría que si todo sigue así tiene muy buena pinta, no te preocupes, sigue observando (se aprende un montóm) y, si notas algo fuera de lo común, siempre puedes llevar tu consulta a un especialista.